El paisaje natural de la Laguna Setúbal presenta hace varios días una particular muralla de vegetación a la altura de los pilotes que impide la circulación de embarcaciones. Las plantas conformaron un dique que algunas personas intentaron despejar sin éxito el pasado fin de semana.
Veo Noticias dialogó con Zuleica Marchetti, investigadora de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la UNL, quien explicó: "a finales del año pasado, aparecieron las primeras masas de vegetación que quedaron encalladas en los pilares. Esa primer masa de vegetación sirve de sostén para otro tipo de plantas que van llegando por los canales, el volumen va aumentando hasta que se forma un dique. Es una vegetación propia del sistema fluvial del río Paraná, que con el repunte natural se desprenden de los cauces y llegan aguas abajo.
"Lo que vemos en superficie no ocupa más de 50 cm en profundidad. En superficie es una foto que sorprende, pero del pelo de agua hacia abajo no compromete más de 50 o 60 cm. Por debajo de la vegetación el agua y los sedimentos siguen pasando. La vegetación no representa ningún peligro para la dinámica natural del ambiente. Si la retiramos o no dependerá del uso que queremos darle a la laguna, porque lo cierto que la circulación de embarcaciones está totalmente interrumpida", agregó la especialista.
