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Greenpeace alertó sobre el incremento de desmontes ilegales en el norte del país

La organización ecologista detectó que se deforestaron 51.600 hectáreas, un 25% más que en el mismo período de 2022.

03 de agosto de 2023


Chaco y Santiago del Estero: Las provincias más afectadas

En un informe presentado por Greenpeace, se destaca un aumento significativo en la deforestación durante el primer semestre del año en el norte del país. La organización ecologista detectó que se deforestaron 51.600 hectáreas, un 25% más que en el mismo período de 2022 (41.332 hectáreas). La situación más alarmante se registra en Chaco y Santiago del Estero, donde la mayoría de los desmontes son ilegales.

“Es preocupante el aumento de la deforestación y, sobre todo, que la mayoría sea ilegal. En Santiago del Estero el gobierno viola la Ley Nacional de Bosques al autorizar desmontes para ganadería donde no está permitido. Mientras que en Chaco la justicia provincial suspendió los desmontes a fines de 2020, pero las topadoras avanzan cada vez más. El gobierno controla poco y es evidente que las multas no son suficientes para terminar con este ecocidio. Penalizar los desmontes ilegales parece la única solución”, afirmó Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace.

Llamado a la acción

Giardini expresó su preocupación por el aumento de la deforestación y la prevalencia de desmontes ilegales. "La deforestación provoca desaparición de especies, cambio climático, inundaciones, sequías, desertificación, enfermedades, desalojos de indígenas y campesinos, pérdida de alimentos, medicinas y maderas. Estamos ante una evidente emergencia climática y de biodiversidad que nos obliga a actuar en consecuencia. Es hora de terminar con la impunidad" explicó.

Números preocupantes

El relevamiento realizado por Greenpeace arroja datos alarmantes sobre la deforestación en el norte del país. Entre enero y junio de 2023, se han deforestado 24.522 hectáreas en Chaco, mientras que en Santiago del Estero se han perdido 19.040 hectáreas de bosques nativos. Formosa y Salta también se ven afectadas, con 5.804 y 2.234 hectáreas deforestadas respectivamente. Esta pérdida de bosques se debe principalmente al avance de la frontera agropecuaria para la ganadería y la soja, actividades que, en gran medida, tienen como destino la exportación a Asia y Europa.

Fuente: Greenpeace