Por Juan Trento
Este sábado, antes de las 19,35, tres policías del Comando Radioeléctrico capitalino intervinieron directamente en un violento enfrentamiento armado entre delincuentes de bandas criminales antagónicas en proximidades de la esquina que forman las calles Lamadrid y Perú del barrio Barranquitas en el cardinal oeste capitalino, y el trabajo policial tuvo como resultante inmediata la aprehensión de uno de los partipantes de 22 años al que le secuestraron un arma de guerra cargada y con olor a pólvora, y tres policías heridos, uno de ellos con un profundo tajo en la pantorrilla de su pierna derecha.
Denuncia
Alrededor de las 19,30, los vecinos que viven en inmediaciones de la esquina que forman las calles Perú y Lamadrid en el barrio Barranquitas, llamaron con desesperación a la central de emergencias 911, para pedir la urgente presencia policial, ya que existía un intenso tiroteo entre delincuentes de facciones antagónicas, posiblemente relacionados con la venta de drogas. Al lugar llegaron oficiales y suboficiales del Comando Radioeléctrico capitalino, que cuando se estaban aproximando escucharon las deflagraciones de los disparos de armas de grueso calibre, y pidieron apoyo al operador del 911.
Arma de guerra
Otros oficiales y patrulleros se fueron aproximando, hasta que en un momento, bajaron los policías de los móviles y lograron aprehender a uno de los más conspicuos participantes que con la piernas abiertas y un arma entre sus manos disparaba a diestra y a siniestra. Le impartieron la voz de Alto Policía, el desconocido giró, cuando se vio cercado por los policías, escapó corriendo, fue perseguido, aprehendido y neutralizado, y le secuestraron una pistola calibre 9 milímetros con olor a pólvora.
Agresiones y balazos de goma
Luego, otros delincuentes de la misma facción que el aprehendido, la emprendieron a cascotazos contra los policías. Éstos les respondieron con balazos de goma para no dejarlos avanzar. En medio de esa situación, uno de los policías fue agredido con un objeto contundente y cortante, y tuvo la parte inferior de su pierna derecha completamente ensangrentada. Entonces, llegaron otros móviles de apoyo de la agrupación Cuerpos, sacaron al aprehendido identificado como J. E. S. de 22 años. Otros policías, simultáneamente, revisaron la pistola calibre 9 mm. que le secuestraron, tratándose de una Bersa modelo Ultra Compact PRO con una bala en la recámara, otras cuatro en el almacén del cargador, con evidente olor a pólvora, y en buenas condiciones de conservación y de funcionamiento.
Delincuente preso
El delincuente aprehendido finalmente fue llevado y alojado en uno de los calabozos de la Comisaría 6° del barrio de Barranquitas, y el arma de fuego de guerra permaneció con cadena de custodia, mientras tanto, otros policías en un patrullero llevaron al policía herido, oficial Leguizamón hasta el hospital Cullen, donde fue asistido por los médicos de la Emergentología en el shockroom para pacientes en estado crítico, recibió sutura interna y externa en el tajo de al menos 20 centímetros, y quedó internado en observación.
Delito imputado
Informaron la novedad sobre la ocurrencia del procedimiento, aprehensión de uno de los violentos delincuentes con el secuestro del arma de guerra usada en el enfrentamiento a balazos y la asistencia posterior del oficial Leguizamón herido a la Jefatura de la Unidad Regional I La Capital de la Policía de Santa Fe, y éstos h icieron lo propio con el fiscal en turno del Ministerio Público de la Acusación, Daniel Alberto Filippi, que ordenó que el aprehendido siguiera privado de su libertad, que sea identificado y que se le forme causa como presunto autor del delito de "portación indebida de arma de fuego de guerra".
Derivaciones
Una mujer policía de la agrupación Cuerpos que formó parte de los policías que actuaron en el procedimiento fue amenazada por algunos delincuentes que le gritaban que le quemarían su vivienda particular, ya que ella también es vecina del barrio. Hicieron constar el suceso en el acta de procedimiento elevado a la jefatura policial capitalino, y éstos hicieron lo propio con el fiscal MPA Filippi, que ordenó un informe detallado del asunto.
