La bajante del Río Paraná genera inconvenientes en la provisión de agua. Se desplegarán cuatro Comités de Operaciones en la región litoral por si se complejiza la provisión del recurso. La mayor preocupación es el abastecimiento de agua a poblaciones lejanas al río.
Gabriel Gasparutti subsecretario de riesgo manifestó a Veo Noticias que "se trazaron tres escenarios posibles: que se mantenga la situación así como está, un empeoramiento de la situación a fines de octubre y una situación de catástrofe".
En base a esto, el ministerio de Obras Públicas destinó una partida de mil millones de pesos a las siete provincias afectadas para obras de infraestructura de captación de agua.
"Muchas provincias lo han pedido ya, incluso Santa Fe. Hay máquinas que ya se están instalando", añadió.
Gasparutti explicó que se establecieron bases de operación y se articularon relaciones con todos los ministerios de las provincias involucradas, cómo por ejemplo con Corrientes, que permitirá atender Chaco, Corrientes, Misiones y Formosa. Santa Fe Capital que tiene problemáticas particulares, otro en Paraná y otro en Zárate. "He estado recorriendo las provincias de Chaco, Corrientes y Misiones para ver cómo se encuentra la situación", explicó.
