El Dr. Sebastián Oroño es uno de los abogados defensores de Juan Pablo Rivero, quien fue condenado el pasado 22 de febrero, en un polémico juicio por varios motivos, a 9 años de cárcel, acusado de dar muerte de manera intencional a Emiliano Arri.
En el programa “Será Justicia”, que conducen Andrea Viñuela y “Nacho” Mendoza, en la FM 91.7 con réplica en Veo Santa Fe, el abogado manifestó sobre este fallo: “La verdad que me sorprendió. Creo que las personas que estuvimos en el juicio, todos creo que fue muy clara la maniobra que por la que se acusó a Rivero no fue la que causó la muerte de Arri. Esto quedó por demás de evidenciado y al escuchar la condena nos tomó de sorpresa”.
Luego, Oroño indicó: “Lo que alegamos como muy pocas veces en un juicio, quedó demostrado con los videos de la cámara de seguridad. La muerte de Arri se produjo por circunstancias diferentes a la maniobra de Rivero, a Rivero se lo acusó de haber dado muerte de manera internacional y con una llave en el cuello y que produjo supuestamente una asfixia por compresión mecánica. Se pudo ver, más allá de que desfilaron profesionales en artes marciales, médicos, legistas, se pudo ver a los que nos consideramos legos en medicina un video captado por una cámara de seguridad donde se vio que Arri estuvo con vida durante un largo período de tiempo. Fue imposible que haya sido asfixiado”.
Y amplió lo que ya alegó varias veces durante el juicio oral. “La defensa presentó el testimonio del Dr. Villalba, médico legista de larga trayectoria en Buenos Aires. El muchacho que falleció sufrió Síndrome de Delirio Fatal Agitado, produce un paro cardio respiratorio, arritmia, paro y muerte. Esto se sustentó con las autopsias sobre el cuerpo, la prueba documental que se incorporó el juicio. Todos los expertos, todos, manifestaron que para que haya una muerte por asfixia, la persona se tiene que desmayar y se tiene que continuar con la compresión. Quedó acreditado que nunca Arri se desmayó tras la llave, ni después, ni luego por un período de tiempo demasiado considerable” y aclaró: “Rivero una vez que lo suelta, no lo vuelve a tomar del cuello”.
En cuanto a por qué se lo llevó a ese rincón donde quedó filmada la escena, cerca del guardarropas, el doctor Oroño indicó: “Esa noche tocaba Mario Pereyra y había mucha concurrencia. Cuando se pretende reducir a Arri comienza un conflicto bastante virulento y lo llevan hacia la salida de emergencia, el guardarropas da a una salida de emergencia y no hay contacto con la gente. Llevarlo a la fuerza por la puerta principal era peligroso para muchas personas porque tenían que cruzar toda la pista de baile, un pasillo, un pub y sacarlo”.
En cuanto a lo que pedirá la defensa de “Pali” una vez que se conozcan los fundamentos que deberían estar este viernes o el lunes a más tardar “nosotros planteamos la absolución aunque dejamos abiertas las hipótesis alternativas como se dijo en el alegato de clausura debido a que no hay duda de que esa maniobra no causó la muerte y tampoco se pudo corroborar el dolo que requiere la figura para condenar a alguien por homicidio doloso, alternativamente podría haber sido homicidio culposo o preterintencional, pero de ahí a un homicidio doloso hay una eternidad. No sé cómo lo van a justificar”.
Y sobre Serrano, el quinto acusado que no fue partícipe del juicio, que quedó en libertad mientras los otros cuatro continuaron con la preventiva, el profesional vaticinó: “Me juego la cabeza que nuestro defendido va a ser interpretado por dolo eventual porque no admite participación. Creo que está bien que hayan absuelto a los demás, no tenía que ser condenado Rivero ni todos los demás por supuesto” pero lo de Serrano “estos son los abortos que tiene la justicia santafesina, y lo planteamos, a esta otra persona no se la va a juzgar, acuérdense lo que les digo, nosotros planteamos que no se podía reconstruir la realidad de los hechos, con 5 personas, incluyendo a 4 por un lado y a una quinta por el otro. A Rivero se le vencía la prisión preventiva y entonces armaron un juicio para que no caduque la preventiva. Se le pasan los tres años a la justicia y se hace cualquier cosa para que la gente no salga en libertad vencido el plazo”.
