El Juez Nicolás Falkenberg consideró que el agente César Rodriguez actuó en legítima defensa y ordenó que sea liberado tras permanecer detenido dos años y dos meses.
Tras la realización de la audiencia de admisión del procedimiento abreviado, había mejorado la situación procesal del imputado ya que se le atribuída el delito de homicidio calificado con exceso de legítima defensa.
Finalmente, la resolución del Magistrado fue absolver de culpa y cargo a César Rodríguez, al considerar que el joven policía había actuado en legítima defensa. Para el Juez está probado que Rodríguez fue atacado primero por Tula, cuando éste le propinó un golpe en la nuca con la culada del arma de fuego tras lo cual Rodríguez huyó y Tula efectuó varios disparos.
El Magistrado entendió que "nada puede achacarse al imputado, que primero evitó defenderse de la agresión intentado correr, es decir, sin desplegar violencia de ningún tipo, más luego, ante la persecución y la andanada de disparos efectuados por Tula -más de uno, según la imputación-, apenas pudo, aprovechó el momento que Tula no disparaba, tomó su arma -hasta entonces no exhibida- y sin dejar de correr, en tan dramático trance, logra efectuar un único disparo, con el desenlace ya conocido”.
