Por Juan Trento
Este sábado, y como corolario de una larga y paciente investigación de varios meses, pesquisas antinarcóticos de Policía Federal y de la Justicia Federal, ambas con sede en la ciudad de Santa Fe, ejecutaron seis allanamientos simultáneos en distintas viviendas del barrio Guadalupe Oeste. Luego de la irrupción en los distintos inmuebles, fueron aprehendidos los dos principales investigados, identificados como R. R. B. y G. A. C., al frente de una organización con ramificaciones en la venta de drogas en la capital santafesina y otras ciudades y localidades de la provincia. Además, secuestraron estupefacientes, armas, balanzas electrónicas y digitales, teléfonos celulares y más de medio millón de pesos.
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La investigación
Dos hombres sobre los que se sospechada su principal actividad dedicada a recibir estupefacientes, estirarlos con distintas sustancias y distribuirlo en diferentes puntos de venta, tanto de la ciudad capital y otras ciudades y localidades, todos de la provincia de Santa Fe, fue la novedad que llegó a oídos de los oficiales y suboficiales de la División Unidad Operativo Federal DUOF Santa Fe de la Policía Federal Argentina, y éstos lo hicieron saber a uno de los fiscales federales con sede en Santa Fe, y éstos ordenaron profundizar la investigación, que demandó varios meses con escuchas telefónicas, filmaciones y fotografías que fueron registrando la actividad de los dos principales investigados, -que no son los únicos- mientras desplegaron su actividad en el territorio. Finalmente, con la investigación concluída, informaron la situación de lo investigado.
Allanamientos y aprehensiones
La Justicia Federal ordenó el allanamiento simultáneo de seis inmuebles, todos ubicados en el barrio de Guadalupe Oeste, y con las primeras luces del amanecer del sábado, fueron ejecutados cada uno de ellos, donde fueron aprehendidos los principales investigados, identificados como R. R. B. y G. A. C., uno de ellos con antecedentes penales por haber purgado un delito con pena privativa de la libertad en una cárcel local por un delito ordinario.
Drogas, armas, balas y dinero
Además, durante la ejecución de las requisas en cada uno de los inmuebles se secuestró un kilo de cocaína, un compacto de marihuana, más de 500 mil pesos en efectivo, dos balanzas electrónicas, una sustancia aún no definida usada en el estiramiento de la cocaína -y que será sometida a varios peritajes para establecer su condición química-, una pistola calibre 380 - que es un arma de guerra- popularmente conocida como una pistola calibre 9 milímetros chica con una bala en la recámara y otras siete en el almacén del cargador, dos escopetas de grueso calibre -una de ellas con pedido de secuestro activo por robo- con 20 cartuchos rojos intactos, siendo que las tres armas fueron revisadas y están en buenas condiciones de conservación y de funcionamiento, o sea, aptas para el disparo, siete teléfonos celulares de distintas marcas y de diferentes modelos
