Este miércoles, en las primeras horas de la tarde, oficiales y suboficiales de Gendarmería Nacional Argentina, hallaron en el interior 69 ladrillos de cocaína de distintos tamaños, que pesaba 54 kilos con 990 gramos de cocaína, y dos teléfonos celular en un Nissan Sentra. Ocurrió mientras ejecutaban operaciones de Prevención Activa con chequeos selectivos de personas y de vehículos sobre la ruta nacional 34, a la altura de la localidad de Pinto, Casares en el departamento Aguirre en la provincia de Santiago del Estero
El conductor del vehículo y su acompañantes fueron identificados, son oriundos de Tucumán y se determinó que el vehículo fue comprado recientemente. La articulación de la información obtenida por los gendarmes da cuenta que el lugar de origen del viaje era el norte argentino y tenía como destino la provincia de Santa Fe, esto quedó revelado en los GPS de los celulares incautados.
Los tornillos brillosos
Los gendarmes que revisaron el interior del vehículo, cuando el conductor y su acompañante ya estaban descendidos del habitáculo y custodiados, desmontaron el torpedo del vehículo, y lo que presumieron por el nerviosismo de los dos ocupantes y el brillo de los tornillos, se trataba de un montaje reciente. Así fue como fueron apareciendo acondicionados los ladrillos con la clásica envoltura. A esa altura ya estaban en camino los peritos que realizaron el narcotest sobre la sustancia secuestrada, que constataron que efectivamente se trataba de cocaína y cuyo pesaje fue de 54 kilos con 990 gramos de cocaína. También quedaron secuestrados los dos teléfonos celulares de cada uno de los dos aprehendidos,
Narcos incomunicados
Informaron la novedad sobre la ocurrencia del procedimiento de aprehensión de los narcos y el secuestro de los 54 kilos con 990 gramos de cocaína, el auto Nissan Sentra y los dos teléfonos celulares a la Jefatura de la Región de Gendarmería Nacional, y éstos hicieron lo propio con la fiscalía y el juzgado federal, que ordenaron que los dos aprehendidos siguieran privados de su libertad, que sean identificados y que se les forme causa como presuntos infractores de la ley nacional de estupefacientes N° 23.737. Además, desde la misma sede judicial, ordenaron que todos los elementos secuestrados siguieran con una férrea cadena de custodia.
