Al menos nueve indígenas del suroeste de Colombia resultaron heridos este 9 de mayo tras ser atacados con armas de fuego mientras se dirigían a una protesta en la ciudad de Cali, epicentro de las manifestaciones que sacuden el país desde hace 12 días.
La caravana fue atacada por "policías y civiles armados en conjunto", denunció el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) en un comunicado público. Según la autoridad de salud local, tres de los heridos tienen "lesiones graves".
Los hechos aún están por esclarecerse. Mientras que los civiles aseguran que fueron atacados con piedras y machetes por los indígenas, a quienes acusan de haber "vandalizado" varios condominios del sector, los indígenas alegan que fueron atacados con armas de fuego y que la policía apoyó a quienes los agredieron.
Según diversos informes, los disturbios se presentaron cuando civiles organizados intentaron evitar el paso de la que se conoce como Minga Indígena en el sur de Cali.
La Defensoría del Pueblo (ombudsman) asegura tener "evidencia de presuntas acciones de disparos o agresiones desde carros no identificados" contra la caravana de indígenas. El CRIC registró en una transmisión en vivo de Facebook el momento en que la caravana es atacada a tiros. Videos de transeúntes que circulan en las redes revelan acciones de este tipo, así como civiles disparando y después refugiándose en carros de la policía.
"Urgimos porque se investigue y sancione el ataque", reclamó en Twitter Juliette de Rivero, representante de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU en Colombia, agregando que entre los heridos se encuentran "varias mujeres lideresas y defensoras".
La Policía Metropolitana de Cali aseguró por su parte en un boletín de prensa que los uniformados se encontraban en la zona atendiendo "el llamado de auxilio de la comunidad (...) que estaban siendo atacados por un grupo de indígenas" y señaló a los originarios de lesionar a cuatro personas "con armas cortopunzantes y objetos contundentes" e incinerar y vandalizar varios vehículos.
Tras los hechos, el presidente Iván Duque, que se negó a viajar a Cali "por prudencia", pidió que se realice "el mayor despliegue" de fuerza pública en la ciudad de Cali, e instó a que se levanten los bloqueos de las vías que están generando desabastecimiento en regiones del país.
"Para evitar confrontaciones innecesarias, yo quiero hacer un llamado a los señores del CRIC para que retornen" al vecino departamento de Cauca, dijo Duque. "Las imágenes que estamos viendo en la ciudad de Cali ameritan de parte de todos nosotros actuar con toda la prudencia", agregó.
Fuente: AFP
