La justicia santafesina dio un paso muy relevante a casi 50 años del asesinato de Marta Zamaro y Nilsa Urquía, quienes eran abogadas, activistas y trabajadoras de prensa del Nuevo Diario de Santa Fe. El detenido es santafesino, fingía ser militante del Partido Revolucionario de los Trabajadores local, pero era un agente civil de inteligencia infiltrado.
En la acusación formal contra el detenido, el fiscal a cargo de la causa sostiene que “se le imputa la presunta comisión, en su calidad de partícipe necesario, de las privaciones ilegales de la libertad agravadas por haberse cometido con violencias y amenazas, tormentos agravados por haberse cometido contra perseguidos políticos y de los homicidios de Marta Adelina Zamaro, Nilsa María Urquía y César Zerbatto, y de la privación ilegal de la libertad agravada por haberse cometido con violencias y amenazas y los tormentos agravados por haberse cometido contra perseguidos políticos, en perjuicio de Osvaldo E. Regazzoni, todos en concurso real”.
Luis Larpín, integrante del Foro contra la Impunidad y por la Justicia de Santa Fe, expresó: "no hay razones para que se siga demorando el juicio, ya tuvimos demasiadas demoras porque el juez no decretaba la indagatoria. Gracias a una apelación de la Cámara de Rosario pudimos lograr que sea apresado e indagado, pero ya pasaron 40 días y no se firma el procesamiento". Además, Larpín agregó que "esta causa es una prueba clara de que el plan sistemático existió siempre, incluso antes del 24 de marzo de 1976. Pero ya la dictadura de Lanusse en el año '72, mientras estaba llamando a elecciones por la presión popular, estaba preparando nuevos dispositivos de represión para el exterminio. Entre ellos estaba esto de infiltrar agentes de inteligencia para poder exterminar. Esta persona se vanagloria de estas cosas, dice que los objetivos eran 150 e hicieron caer 147. Eso muestra que era sistemático y organizado".
En tanto, Fernanda Urquía, familiar de una de las víctimas, sostuvo: "para mí es una sorpresa muy grande, yo tenía 6 años cuando sucedió todo esto y justo a 50 años nos remueve todo. En mi familia siempre se habló del tema, es un momento histórico, hay que tomarlo y seguir adelante".
