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La madre de Ayrton Senna recordó a su hijo a 25 años de su muerte: "Fue un iluminado que quería cada vez más"

30 de abril de 2019


Este miércoles se cumplen 25 años un nuevo aniversario de la muerte del piloto de Fórmula 1 Ayrton Senna. El brasileño marcó la historia del automovilismo y su deceso tras un choque en el Gran Premio de San Marino conmovió al mundo del deporte. Para algunos fue un ídolo, para otros un referente, pero para Neyde Senna da Silva fue su hijo.

En el marco del aniversario de la tragedia, el sitio Senna TV publicó un video con imágenes del piloto junto a su madre, quien describe durante poco más de dos minutos cómo era su hijo.

"Él necesitaba más. Él quería emoción. Él quería movimiento, él quería sentir. Él se desafía a sí mismo. No era como los otros, era como él mismo", relató la mujer en referencia a la infancia del brasileño que se convirtió en una estrella de la Fórmula 1 y ganó tres títulos de la categoría, 1988, 1990 y 1991.

Milton Senna, Neide y Viviane Senna en el funeral de Ayrton en 1994 (Reuters)
Milton Senna, Neide y Viviane Senna en el funeral de Ayrton en 1994 (Reuters)
Neyde contó también cómo era el lado más tierno de Senna: "Era tierno, era dócil. Él recordaba detalles para la gente. Tomaba una flor y me la traía, sin que nadie le hablara nada. Él era tan tierno, muy tierno con la gente".

La madre del ex piloto rara vez aparece en público y es una de las mujeres que tiene incidencia en el manejo de las licencias de la marca Ayrton Senna, junto con Viviane Senna, hermana de Ayrton presidenta de la Fundación que lleva el nombre del fallecido piloto brasileño.

"Él fue siempre muy compañero mío, desde pequeño, y muy fuerte. Lo extraño mucho. Él me entendía y yo lo entendía mucho, sin la necesidad de hablar demasiado", recordó emocionada Neyde en el video.

El 1° de mayo de 1994, el mítico piloto brasileño tomó a 310 kilómetros por hora la curva Tamburello del Gran Premio de San Marino. Allí su auto perdió adherencia, no le respondió como esperaba o él no alcanzó a realizar la maniobra que pretendía. Nadie supo explicarlo pero el desenlace todavía hoy sigue siendo una de las imágenes más impresionantes en la historia de la Fórmula 1: un vehículo que impactó contra el paredón, quedó sin las dos ruedas del lado derecho y perdió una porción de la carrocería de ese lado. Dentro de él, un Ayrton ya sin vida aunque la noticia se confirmaría tres horas más tarde.